La caza provoca en España la muerte de 50 de millones animales, se vierten más 6.000 toneladas de perdigones de plomo al medio ambiente, levanta miles de kilómetros de vallas cinegéticas poniéndole puertas al campo. Se realizan sueltas incontroladas de especies foráneas y en algunos casos se utilizan lazos, cepos y venenos de forma ilegal para terminar con los depredadores.Cada vez son más las personas que quieren disfrutar de la naturaleza de una manera respetuosa: senderismo, bicicleta de montaña, montañismo, observación de aves y un largo etcétera. La caza condiciona el paso y disfrute de las personas, limitando las actividades pacíficas y responsables en el medio natural. La caza y los vallados cinegéticos limitan el paso, trasiego y contacto de las especies animales, produciendo un aislamiento poblacional de las mismas.El Registro de No Cazadores sirve de referencia entre personas dispuestas a asumir un compromiso de respeto con el medio ambiente apoyando el siguiente manifiesto:Declaro públicamente mi condición de no cazador.Reclamo mi derecho a disfrutar de la naturaleza sin estar sujeto a la amenaza y el ruido de los disparos de los cazadores.Reclamo mi derecho a deambular libremente por los espacios y vías públicas sin estar sujeto a las restricciones y obstáculos a que da lugar la actividad cinegética.Declaro mi compromiso de disfrutar de la naturaleza responsablemente sin dañarla ni molestar ni perjudicar a terceras personas ni a sus bienes legítimos.Los derechos de los animales:
· Inscríbete en el Registro de personas No CazadorasImágenes del impacto de la caza
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